Más de una vez he tomado una decisión que le gusta a mi razón, mas no a mi corazón.y sí. recurro a esta tranquilizadora y manoseada frase una y mil veces. la traigo a mi mente como un comodín, respiro profundamente, me la repito un millón de veces. suspiro, sonrío y sigo con mi vida con la total satisfacción de que he hecho lo correcto. el problema es que es sólo por las siguientes horas, por que luego vuelven las preguntas con esa sensación insoportable y desgarradora del corazón, que pareciera que fuera a volar de mi pecho....y hasta parece que mi humanidad en su límite de complicidad se une toda para que, mi conciencia de dia, y mi inconsciencia de noche, se pierda en una sucesion de escenas que corren en mi imaginacion como un carrusel, colmado con sonrisas de niños. Es divertido.Porque rápidamente mi corazón, ¡Mi tan amado y polémico corazón!, detecta mi escena preferida..sí. esa que amas y odias a la vez. esa que provoca en ti la sonrisa mas ancha y pura ...y el llanto mas amargo y sincero.
entonces recuerdas que solo lo estás soñando..que DEBES despertar, abrir los ojos, ver el amanecer,ver a tus vecinos hundidos en la cotidianidad de sus vidas, y como un gesto de aceptación, respirar la brisa de la mañana y volver a repetir, por billonésima vez que TODO PASA POR ALGO, que tu razón no estaba tan equivocada, que de seguro tu tan amado y polémico corazón si lo hubiese estado, que tal vez lo que dicen tus amigas sea cierto.."tienes que seguir con tu vida, de seguro mas adelante encontrarás quién no divida la razón de tu corazón.
todo pasa por algo, coge tus cosas, sonríe a tu camino y anda".
